Probablemente esta es una de mis recetas más socorridas y de las que más repito siempre. Un clásico de los estudiantes y muy fácil de alterar añadiendo o cambiando algunos ingredientes. Si queremos incorporar más verdura podemos añadirle un calabacín o algunas zanahorias, que le aportarán dulzor.
Otra de las cosas que me gustan de esta receta es que te puede servir tanto para acompañar unos macarrones, que un arroz, o incluso de relleno para empanadillas. O como si quieres comértelo entre dos trozos de pan, ¡es que está riquísimo!
Quizá uno de los puntos más interesantes de esta receta es que… yo no pongo la soja texturizada a remojo. En un artículo os explicaré con más detalle el por qué de eso, pero por ahora tendréis que darme un voto de confianza, os aseguro que está más rico así.
Como ingredientes opcionales menciono el jengibre y la pasta de miso. Entiendo que habrá gente que no los tenga en su casa, pero yo personalmente ya no puedo vivir sin echarle estos dos ingredientes a los platos más «carnosos». No es imprescindible, pero le darán el punto aromático y umami a tus platos si quieres ya una receta de 10.
Macarrones boloñesa
- 400 g de macarrones
- 1 cebolla grande
- 1 diente de ajo
- 1 pimiento
- 420 g de tomate frito
- 250 g de tofu ahumado
- 50 g de soja texturizada
- 2 cdas. de salsa de soja suave
- 3 cdas. de aceite de oliva
- Medio vaso de vino tinto
- Orégano
- Tomillo
- Hierbas provenzales
- 2 hojas de laurel
- Un puñado de hojas de albahaca (opcional)
- Jengibre en polvo (opcional)
- 1/2 cda. de pasta de miso blanco (opcional)
- Sal
- Pimienta
Elaboración
- Cortamos la cebolla en daditos mientras ponemos una sartén grande con aceite a calentar a fuego medio-bajo. Cuando ésta esté caliente echamos la cebolla. Pelamos y cortamos el diente de ajo y lo echamos también en la sartén. Salpimentamos la mezcla y dejamos que se haga, teniendo cuidado con el fuego y removiendo de vez en cuando para que no se nos queme la cebolla.
- Mientras que dejamos que se haga la cebolla podemos lavar y cortar el pimiento en daditos, también. Quitamos la parte blanca y las semillas bien. Cuando la cebolla empiece a ponerse blandita y blandita es cuando podemos echar el pimiento. Añadimos 2 hojas de laurel a la mezcla dejamos que se termine de hacer la cebolla.
- Cuando la cebolla esté blandita y transparente, subimos el fuego al medio hasta que el contenido de la sartén empiece a chisporrotear. Ahora es cuando podemos añadir la salsa de soja y el vino tinto. Cogemos el tofu ahumado, lo lavamos debajo del grifo y lo secamos con una toalla; acto seguido podemos desmenuzarlo en la sartén y lo mezclamos todo. A continuación añadimos la soja texturizada y dejamos unos minutos la sartén a ese fuego para que se evapore el alcohol del vino.
- Pasados unos minutos añadimos a la mezcla todas las especias: el orégano, el tomillo, las hierbas provenzales y las hojas de albahaca. Si tenemos en casa podemos echarle un poco de jengibre en polvo. Retiramos las hojas de laurel y removemos la mezcla continuamente, bajamos el fuego un poco.
- Cuando veamos que la soja texturizada empieza a tostarse podemos echar el tomate frito y la pasta de miso blanco, si tenemos. Mezclamos todo bien para que se incorporen los sabores y todo termine de hacerse bien. Mientras tanto podemos hacer la pasta siguiendo las instrucciones del paquete.
- Una vez esté hecha la pasta comprobamos que la soja esté blandita y que se haya hecho bien, también podemos corregir el punto de sal. Cuando esté a nuestro gusto podemos incorporar los macarrones a la sartén, mezclamos todo bien y ya tenemos nuestro plato delicioso listo.